En las Tablas de Daimiel se respira oxígeno puro
y se oyen los cantos de las aves, el aire susurrando entre los carrizales…
mientras no pase una horda de “personas” hablando, gritando y riendo sin control.
Parque Nacional
Mientras lees este artículo, enciende los altavoces (o ponte los cascos) y escucha los sonidos que podrían acompañarte durante tu paseo por el PN de las Tablas de Daimiel. Han sido grabados por Rubén Garrido. A mí me encanta escucharlos.
Hay que buscar el momento adecuado para visitar el parque y evitar las aglomeraciones, que no te permitirán disfrutar de los sonidos de la naturaleza.
Nosotros tuvimos suerte… y también la buscamos.
Elegimos realizar la visita a las Tablas de Daimiel un día entre semana a finales de abril, para visitar un oasis de naturaleza pura (o casi) ya que diez días antes se habían reunido allí mismo unos 1.500 coches…
Información previa
Antes de visitar el Parque Nacional infórmate y lee algo de su historia, su flora y sobre todo su fauna. Recomendaciones:
- Ministerio de Medio Ambiente
Mira la fauna: fotos y grabaciones del sonido de cada ave. Precioso. - Blogs de fotógrafos con cuidadas fotos, vídeos y narraciones sobre sus experiencias.
Konico.
Visita (formas y rutas)
Para ver el parque se puede hacer de 3 formas:
- “Por libre“
- “Visita guiada gratuita”
Llamando al PN de las Tablas de Daimiel (926.69.31.18.) en grupos máximos de 30 personas. - “Visita guiada con empresas privadas“.
Un guía se encarga de un grupo pequeño y te dejan unos prismáticos cada 2 personas.
Nosotros contratamos la visita guiada de la empresa Ecodestinos a través de la web de Destinos Manchegos. La visita consistía en realizar la ruta amarilla o isla del Pan con posterior ruta en todoterreno por una zona restringida. Reservamos y pagamos online.
Darío fue nuestro guía: nos demostró que se puede ser un pozo sin fondo de conocimientos sobre las Tablas de Daimiel y transmitirlos con entusiasmo y paciencia a los que te rodean. ¡Fantástico trabajo!
Ruta Amarilla
La visita por la ruta de la isla del Pan (ver mapa de rutas/itinerarios), nos lleva por las famosas pasarelas de madera de isla en isla pudiendo disfrutar de las aves que se pasean por las aguas de esa zona sin mucho miedo.
Presenciamos la lucha titánica entre un somormujo lavanco y un pez gato. Para vuestra tranquilidad os comento, ganó el somormujo y se tragó al pez, pero le costó un buen rato. 😉
El asombroso telescopio que llevaba nuestro guía Darío (¡Swarovski hace mucho más que bisutería!) y la destreza que posee localizando y enfocando aves, te permiten visualizar detalles con una nitidez increíble.
Ruta Azul
Una vez finalizada la ruta con Ecodestinos y después de comer algo ligero e hidratarnos, hicimos la ruta azul o Torre de Prado Ancho, muy recomendable. Aunque es la más larga, no es nada pesada y siempre te puedes dar media vuelta cuando quieras.
El tiempo que se tarda en realizar las rutas y que indican en las guías es muy aproximado, porque depende de lo que te guste observar y escuchar desde los numerosos miradores construidos en madera, desde donde observas sin molestar.
Si horas después de abandonar el parque, sigues hablando bajito e incluso susurras durante la cena… ¡regálate algo! Ha calado en ti el respeto y amor por la naturaleza.
Almagro
Queríamos ver anochecer junto a los flamencos cerca de la casa rural donde nos alojabamos, así que hicimos tiempo visitando Almagro brevemente.
Buena infraestructura con aparcamiento gratuito (calle Chile) al lado del centro. Aparcas y caminas cómodamente.
Dos cosas a destacar de Almagro: encajes y teatro.
A día de hoy, no soy capaz de comprar pañitos de encaje para mi casa. Y me llama la atención la importancia y el mimo que le dedican en Almagro al museo del encaje. Por cierto, a principios de junio se realiza el encuentro nacional de encajeras.
El festival de teatro de Almagro es en julio, momento en el que este pueblo se vestirá de gala. Hasta que lleguen los actores, colaboradores y público en general, el pueblo se prepara poco a poco, con calma, para dicho acontecimento que hará vibrar de nuevo su plaza, calles y comercios.
“Los Charcones”
Después de un día tan intenso, ¡¡¿a ver quién es el guapo que quiere irse a ver la tele…?!!
Había todavía luz y no queríamos desperdiciarla sin ver más bichitos. Nos fuimos hacia el pueblo de Miguel Esteban, donde dormíamos esas noches.
Allí, a distancia y agudizando la vista, “Los Charcones” de Miguel Esteban nos regalaron flamencos con ese precioso perfil semiblanco que te hipnotiza, hasta que despliegan las alas y descubres ese negro-rosado tan intenso y espectacular.
Cena en Santa Ana
Agotados y hambrientos, volvimos a la casa rural Santa Ana para ducharnos y bajar a cenar. Queríamos probar los delicatessen (con productos de la región) que Joaquín prepara con tanto mimo.
Conocimos por fin a Óscar, copropietario de Santa Ana, y pudimos disfrutar de sus animadas e interesantes conversaciones.
Al día siguiente, tras desayunar y despedirnos (¡¡gracias chicos por el regalito!! ya están plantadas y recibiendo mimos diarios) emprendimos la vuelta con bastante pena, dejando un poco del corazón en Miguel Esteban y sus alrededores, donde pensamos volver a recuperarlo en breve.
Enlaces de interés:
Centro de visitantes
13250 – Daimiel (Ciudad Real).
Tfno: 926.69.31.18.
Horario: 9.00-21.00 (verano) y 8.30-18.30 (invierno).
Dirección General de Turismo, C. y A. Castilla-La Mancha–> Tablas Daimiel
Accesos por carretera: pinchar aquí.
Listado de hoteles, bares y empresas de turismo activo, externas al PN pero suministradas por el PN: pinchar aquí.
Ayuntamiento de Miguel Esteban (Toledo) –> “Los Charcones“
Turismo en Almagro.
Museo de Encaje y Blonda.
Festival Internacional de Teatro de Almagro.
Hermosas fotos y buena descripción.
Pues ya estás preparando la cámara, porque el año que viene, te vienes con nosotros (digo yo…)!!
Este viaje hay que repetirlo. Necesitamos ver más flamencos y más bichitos y… nos vendría bien tu cámara… 😉 pero mejor te vienes tú y tu cámara, ok?
Me ha gustado mucho.
Me alegro mucho Valle !!!
Y gracias desde aquí, de nuevo, por las hermosas fotos que hizo tu marido, Tomás, y que habéis compartido conmigo y con todo el que ve esta excursión.
Este artículo no sería lo mismo sin la calidad de las fotos del ‘ánade friso’, la ‘garcilla bueyera’ o el ‘pato colorado’.
Espero que podamos volver a coincidir en algún otro bello paraje y podamos compartir experiencias y fotografías.
Un beso