Camino descalza por la arena mientras el viento juega con mi pelo.
Respiro bocanadas de oxígeno puro y húmedo, sintiendo un regusto salado en la lengua.
Energía y fuerza, paz…
Así me siento cuando camino a tu lado,
mientras escuchamos los ruidos del silencio y nuestras manos se regalan caricias
Una visita imprescindible. Gracias por el post y un saludo.