No lo entiendo.
Qué poco me gusta hacer la maleta y
¡¡cómo disfruto viajando!!
Este es el principio del viaje y hoy os hablaré sobre 3 cosas:
Chorraditas y anécdotas sobre los vuelos desde Madrid, vía Londres: Madrid (MAD) – Londres – Aberdeen (ABZ)
Cómo y por qué compramos una tarjeta SIM de prepago en Escocia.
Alquiler del coche: cómo recogerlo, en qué fijarte y qué no olvidarte.
Vuelo Madrid – Escocia
El viaje completo eran 5h: Madrid – Londres, unas 2h30′ y Londres – Aberdeen, alrededor de 1h30′.
Todo pareció torcerse cuando, lo que debía ser una breve estancia en el aeropuerto de Heathrow (Londres) de una hora escasa, se convirtió en un retraso de más de tres horas sin explicaciones.
La parte buena de estar tanto tiempo allí, fue conocer la terminal y sus tiendas… ¡Y qué tiendas! Mmmmmmmm.
¡¡Sonia!! Contrólate, que no hemos empezado el viaje y llevas la maleta hasta arriba!!
La anécdota la puso un escocés vestido con un kilt típico de su tierra… No lo llaméis “falda escocesa”, pues les ofende.
¿¿Sabes la típica duda que te entra cuando ves a un hombre vestido así…?? Pues lo averigué sin planificarlo: mi chico fue al baño, detrás fue mi escocés, quien se colocó cerca y lo único que hizo fue levantarse el kilt y… jajaja.
Lo que iba a ser un vuelo con escala de casi 5h se convirtió en una dura jornada de 8-9horas.
Al llegar a Aberdeen (Escocia) y pisar tierra yo quería salir corriendo y ¡¡¡verlo todo!!!
Maletas… Primero maletas. Puffff…!!!
En el único hipódromo que posee el pequeño aeropuerto de Aberdeen, salían maletas y más maletas, fardos, cajas metálicas… Me sentía enana al ver a hombres robustos y abrigados hasta las cejas, recogiendo como si no pesaran nada sus equipajes. Recordé que desde Aberdeen salen ferris hacia los pozos petrolíferos del mar del norte y esta gente iba para allá ¡seguro!
Y yo mirándoles pensé… “¡Ay, madre! ¿¿Habré traído poca ropa de abrigo…??”
Nuestro equipaje llegó en el siguiente vuelo, una hora y media hora más tarde… 🙁 🙁
En vez de comernos las uñas, fuimos haciendo los deberes.
Tarjeta SIM prepago
Queríamos tener un teléfono escocés, para hacer llamadas nacionales y sobre todo, consultar internet (mapas, rutas o excursiones…). Y las tarifas con móvil español son altas en el extranjero.
Además no queríamos dejar de estar conectados con nuestros números por si alguien nos llamaba desde España.
Nuestra decisión: móvil A con “tarjeta española” y móvil B con “tarjeta escocesa”. El móvil B tenía redirigidas las llamadas al móvil A.
En la terminal del aeropuerto de Aberdeen compramos una tarjeta SIM de prepago por importe de 10£.
En Heathrow estuvimos buscando, pero no localizamos ninguna.
Importante
Antes de comprar la SIM, necesitas saber si tu móvil está liberado, cuál es el tamaño de la SIM para tu móvil y la compañía telefónica que deberías comprar.
Liberado o no. Si no está liberado, no se puede cambiar la tarjeta SIM. Así que o lo liberas, u olvídate de todo lo demás.
Tamaño. Actualmente existen tres tamaños: mini-SIM (también llamada standard), micro-SIM y nano-SIM. Asegúrate de cuál usa tu móvil o vete a una tienda de confianza y pide que te lo miren. Y ya de paso aprende cómo se abre y se cambia.
Compañía. Mi chico había investigado y sabía que, actualmente EE (agosto 2015) era la que posee mejor cobertura en el norte de Escocia, seguida de O2.
Precio
Aunque la “tarjeta de prepago” que adquirimos era de 10£, pagamos casi 1£ más por el “soporte físico” (la tarjeta en sí).
La idea es que tú puedes recargarla tantas veces como quieras o necesites, sin cambiar físicamente la tarjeta SIM.
Vamos, como el abono transporte de Madrid. Pagas por el abono físico una vez y lo recargas tantas veces como quieras.
Después de comprar la SIM:
Está muy bien comprar la tarjeta, pero tendrás que ponerla en el móvil y activarla… ¡Qué pereza!
Activación. NO tires el ticket de compra y prestale atención, porque tiene datos esenciales.
Envía un SMS con tu “Voucher Number” al número que te indican en el ticket de compra.
La compañía EE nos regaló 2 MB de datos extras durante los dos primeros días.
Y con 10£ conseguimos 500 MB de datos y 150 minutos de llamadas (nacionales). Suficiente para 15 días de viaje. Y en el caso de necesitar más, podríamos recargarla.
Coche
En el aeropuerto de Aberdeen, al lado del único hipódromo, donde se recogen los equipajes, hay un teléfono gratuito para llamar a tu compañía de alquiler de coches. Y buzones para la devolución de las llaves del coche.
No llamamos hasta tener el equipaje con nosotros. Otra media hora para venir a buscarnos y llevarnos hasta su sede.
Mi sensación de “hemos perdido toda la tarde” disminuyó por la buenísima atención que nos prestaron y al ver el coche de categoría superior a la contratada que nos dieron ¡¡¡¡Yujuuu!!!!
Revisar antes de arrancar el coche y salir de la sede-oficina:
Por fuera del coche:
Estado de las ruedas.
Buscar golpes y arañazos.
Asegúrate que son señalados en la hoja del contrato de alquiler, e incluso hazles alguna foto, por si luego hubiese dudas.
Por dentro del coche:
Nivel de combustible. Si no está hasta arriba, pide que lo señalen en el contrato. Porque tienes que devolverlo como te lo dieron.
GPS. Lo añadimos al alquiler del coche y no nos arrepentimos ni un segundo de tenerlo con nosotros.
Nos pareció imprescindible en un país donde no tienes “datos de internet”.
Importante: si tienes que devolver el coche allí mismo, guarda la dirección actual en el GPS. Te evitará quebraderos de cabeza.
Nuestro alquiler de coche donde incluimos GPS, seguro sin franquicia y el 2º conductor, fue con Celtic Legend.
Otra cosa que conquistó a mi chico fue el nombre del responsable que se puso en contacto con nosotros: William Wallace.
Alquilar coche en Edimburgo tenía peores condiciones (seguro con franquicia, sin 2º conductor…) y el precio era el doble.